Esta historia retrata la constancia de una relación intensa, a veces conflictiva y a ratos amable, entre unos hombres que se lanzaron a la conquista de un territorio y otros que no se dejaron dominar. No pudiéndose aniquilar, los primeros se tuvieron que resignar con hacer ver que seguían mandando, y los segundos se conformaron con demostrar que seguían siendo libres. Unos y otros se mintieron a sabiendas de que lo hacían; dejando en manos de intermediarios la faena de administrar ese malentendido y arroparlo en formulismos que permitían que unos y otros salvaguardaran su dignidad ante sus respectivos súbditos y superiores. La virtuosa articulación del trabajo de los destacados investigadores José Manuel Zavala, Gertrudis Payàs y Tom Dillehay logra un transversal análisis etnohistórico, lingüístico y arqueológico.